Uno doble de crema, por favor
Porque con el doble de crema sabe mejor, Eva San Marcos es feliz en esta escena. Andrea y Toni son dos buenos sifones repletos de nata dispuestos a bañarlo todo para que sepa mejor. Eva, que ya tiene experiencia en estos lares, sabe que hay que agitarlos mucho para que saquen hasta la última gota.