Cuando uno es feo, no muy feo, no os vayáis a creer, pero tampoco normal, aprende a distinguir a los que son amigos y los que no, a las chicas que te quieren y las que no, y bueno, tengo 36 años así que de esos y de esas ya he conocido a unos cuantos. Pero el caso es que de la que hoy vengo a hablaros es del caso que me paso con una chica a la que yo desde el principio supe que queria estar conmigo solo por mi dinero, mi buen coche y mis manos rotas a la hora de gastar dinero. Pero me daba igual, me gustaba que fuera conmigo tan amable, tan atenta y sobre todo una zorra en la cama.
Era morena, con muchos tatuajes, ninguno tonto o de moda, solo tatuajes serios que hablaban de una mujer con una vida corrida, y tenia una sonrisa seductoramente mortal. Así que irremediablemente me enamore de ella. E, irremediablemente, ella, me vació los bolsillos, las cuentas del banco y el alma cuando me dejó. Por eso hoy, viendo sus fotos he querido compartir con vosotros a esta mujer, porque si la conocéis, me gustaría que le dijerais que todavía la quiero…
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